sábado, 25 de junio de 2016

ARTESANOS DEL CENTRO

Tienen el cielo por techo y por pared al aire libre. No sé ni cómo llegan o se van. Están a la hora que paso. Tienen que hacer eso que hacen. No saben si el sol saldrá para poder abrir. A veces me incomodan de verdad. Detesto esa promiscuidad callejera. Otras veces sé que hacen falta. Son los artesanos del Centro y los hay en toda ciudad. Siempre pueden ayudar.
Se arremolinan en dos cuadras de Perú, en Montserrat. No importa su sexo ni su edad.

Mientras pasaba me cruzó una manifestación opositora.
Una joven vandaliza la senda peatonal con entusiasmo estudiantil. Lejos de solucionar problemas está.
Nuevamente la realidad callejera impone sus vendedores de chucherías. Nada es verdaderamente necesario. Todo se puede reemplazar menos el lugar que ocupan en la sociedad. 

Los artesanos de la Ciudad.






No hay comentarios:

Publicar un comentario